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Mensajes > Official Service |
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Title |
Sabiduría de Arriba(5) - Sabiduría de lo Alto (5) |
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Speaker |
Rev. Jaerock Lee |
Pasaje |
Santiago 3:17 |
Date |
2008-09-07 |
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“Pero la sabiduría que es de lo alto es primeramente pura, después pacífica, amable, benigna, llena de misericordia y de buenos frutos, sin incertidumbre ni hipocresía.”
< Introducción > Estimados hermanos y hermanas en Cristo,
Cuando los niños no tienen una comprensión apropiada acerca el dinero, algunos de ellos prefieren las monedas en lugar de los billetes de papel. Suponga que un niño tiene una moneda de 500 de valor, y ustedes le sugieren a él, “Si tú me das esa moneda de 500 de valor, yo te daré 10,000 billetes.” Entonces, el niño le dirá ‘no’ sosteniendo la moneda más fuertemente.
Porque él ha tenido la experiencia con una moneda de 500 de valor para comprar bocadillos o chicles, él conoce el valor la moneda muy bien. Pero él realmente no entiende el valor de una billete de 10,000 de valor.
Desde el punto de vista de un adulto esto puede parecer tonto. Pero Dios ve las circunstancias de la conducta del comportamiento adulto que son tontas como las de este niño.
Dios les dice, “Guarde estos mandamientos y hagan el bien, y yo les bendeciré.” Pero ellos no obedecen.
A sus ojos, guardar los mandamientos de Dios no es realmente beneficioso para ellos por el momento.
Pero aquellos que son espiritualmente sabios entienden muy bien que la bendición de Dios es mucho mayor que un poco de ganancias rápidas, que puedan ganar a través de los métodos mundanos. Es por eso que ellos siguen los atributos espirituales tales como la pureza, la paz, la apacibilidad y la benignidad.
Ésta es la quinta sesión en ‘La Sabiduría de lo Alto’.
A través de este mensaje, yo espero que ustedes entiendan la manera de atraer las bendiciones de Dios, el cual es la fuente de todas las bendiciones.
< Principal> Estimados hermanos y hermanas en Cristo, la sabiduría que es de lo alto es primeramente pura, pacífica, amable, y benigna.
Ser benigno es el buen y hermoso aroma del corazón expresado en los buenos frutos de las palabras y hechos.
Si el corazón de uno está lleno con bondad y verdad, también se muestra como frutos externos.
Se mostrará como frutos de labios de solamente palabras dulces y frutos de hermosos hechos.
Hay tres características principales de la benignidad. En primer lugar, da paz a otros y puede discernir la verdad en cualquier situación de manera que prevenga la fe de ser sacudida.
Cuando una persona que posee la benignidad está llevando a cabo consejería, él puede discernir la escencia del problema y refrescar el corazón de los otros.
Si uno tiene motivos egoístas, sus ojos se bloquearán por su propio beneficio o malos sentimientos.
Pero si no tenemos ningún motivo egoísta, tenemos entendimiento y podemos ver la manera de resolver el problema.
Esto es lo que yo expliqué en la última sesión.
La segunda característica de la benignidad es ser autosuficiente y estar cómodo consigo mismo.
Filipenses 4:11-13 dice, “No lo digo porque tenga escasez, pues he aprendido a contentarme, cualquiera que sea mi situación. Sé vivir humildemente, y sé tener abundancia\\\\\\\\\\\\\\\\\\\\\\\\\\\\\\\; en todo y por todo esto estoy enseñado, así para estar saciado como para tener hambre, así para tener abundancia como para padecer necesidad. Todo lo puedo en Cristo que me fortalece.”
Como ya se ha dicho, si tenemos benignidad, no tendremos agitación de corazón, no solamente en buenos tiempos sino en situaciones difíciles.
No nos desanimaremos ó nos quejaremos diciendo, “Esto es duro y eso es difícil.” Seremos capaces de hacer cualquier cosa con agradecimiento y con gozo.
Es porque la gracia de Dios que tenemos en nosotros es mucho mayor que las penalidades que estamos enfrentando en el momento.
Algunas personas muestran su descontento visualmente cuando las cosas no van como ellos quieren o cuando ellos están en situaciones difíciles.
Ellos se ponen nerviosos, su rostro cambia, y hacen que otros se sientan nerviosos también.
Ellos derraman sus quejas y resentimientos, y pueden también culpar a otros por las cosas que no están saliendo bien. Pero de esta manera, nosotros no podemos resolver el problema. Este tipo de acto puede bloquearnos de experimentar las obras de Dios, y perderemos el corazón de los otros también.
Sin embargo, aquéllos que han cultivado la benignidad no perderán la comodidad en sus corazones, incluso en situaciones difíciles
Ellos no se sorprenden o se entristecen. Calladamente disciernen la voluntad de Dios. Porque la gracia de Dios que han recibido es abundante, porque ellos están seguros del amor de Dios, y pueden estar en paz.
Ellos escogen el mejor curso de acción que pueden en esa situación.
El Apóstol Pablo predicó el evangelio manifestando grandes obras, pero él también pasó por innumerables persecuciones y sufrimientos.
Inclusive cuándo él estaba pasando por persecuciones, él no se preocupó o descorazonó pensando, “¿Por qué debo sufrir estas cosas mientras estoy haciendo la obra de Dios? ¿Qué pensarían las personas de mí?”
Incluso cuando él fue golpeado y sometido a vergüenza delante de mucha gente, e incluso cuando él estuvo sin alimento o sin poder dormir, su corazón estaba siempre en paz.
Era porque el Señor lo salvó mientras él estaba persiguiendo a los cristianos, y esta gracia era tan grande.
También porque él estaba lleno con la esperanza del reino celestial, él no se reprimió por las dificultades del momento.
Una vez, él expulsó un demonio con el poder de Dios, pero debido a que lo había hecho él fue golpeado y encarcelado. En este momento, él no dijo nada como, “¿Por qué Dios no me protegió?” Ni oró nerviosamente diciendo, “Dios, tienes que sacarme rápidamente de esto.”
Él simplemente aceptó la situación y esperó que Dios obrara. Él solo alabó a Dios mientras pensaba en la gracia de Dios.
Era tarde en la noche cuando las alabanzas de agradecimientos resonaron desde una esquina de la cárcel. ¡Pueden imaginarse el hermoso aroma de alabanza que debe haber producido delante de Dios!
El Salmos 50:23 dice, “Él que sacrifica alabanza me honrará\\\\\\\\\\\\\\\\\\\\\\\\\\\\\\\; Y al que ordenare su camino Le mostraré la salvación de Dios.”
Y Dios aceptó el sacrificio de alabanza alegremente y algo verdaderamente asombroso tuvo lugar.
Hubo un terremoto para abrir las puertas de la prisión, y el carcelero y su familia aceptaron al Señor Jesús.
Hermanos y hermanas, mientras nosotros estábamos dirigiendo cruzadas en el extranjero, algunas veces enfrentamos inesperados obstáculos. Pero en todos los casos confiamos en Dios. Cuando hacíamos calmadamente lo que se supone que teníamos que hacer, Dios ciertamente abría el camino para nosotros. En la cruzada de Pakistán, el lugar de la cruzada fue repentinamente cerrado por temor a un ataque terrorista.
Pero en mi corazón yo tenía una convicción, y profesé que la cruzada se celebraría.
Y serenamente esperé, mientras dejaba todo en las manos de Dios.
Ustedes ya vieron cómo dramáticamente las puertas cerradas se abrieron en ese momento.
En el caso de la cruzada de Honduras, una lluvia pesada empezó a caer justo antes del inicio de la cruzada. No parecía que se iba a detener prontamente. Pero confiando en Dios cuando subí a la plataforma, la fuerte lluvia que caía desapareció como una niebla.
Aún más dramática fue la Cruzada en India. Incluso durante la cruzada estaba lloviendo fuertemente, y escuché que muchos de nuestros miembros que estaban orando por la cruzada en Corea estaban muy preocupados.
En el lugar de la cruzada en donde había una fortísima lluvia con fuertes vientos, posiblemente nosotros podríamos perder nuestra fe, si usábamos pensamientos carnales.
Nosotros podríamos estar muy nerviosos y ser arrojados a la confusión pensando, “Dios tiene que detener esta lluvia así como Él ha estado haciendo cosas hasta ahora. No podemos tener una cruzada en esta lluvia.”
Pero nosotros simplemente continuamos la cruzada incluso bajo la fuerte lluvia tratando de entender la voluntad de Dios.
No insistimos en que Dios tuviera que cumplir lo que nosotros queríamos.
Esperamos con expectativas acerca de cómo Dios iba a ser glorificado esta vez. ¡Por supuesto, teniendo paz en la mente sin ser estremecidos, no significa que no hubiese nerviosismo en lo absoluto!
Teníamos todavía que encontrar todas las maneras que fuesen posibles, buscando la gracia de Dios, con determinación de que nosotros también pudiéramos dar nuestras vidas.
Pero en lo más profundo del corazón no había ninguna agitación, y nosotros estabamos en paz confiando en Dios.
Cuando esa confianza es verdadera, Dios ciertamente nos contestará y se glorificará.
En la Cruzada de India, también, aunque no lo supimos en el momento, era la bendición de Dios. Simplemente es que los hombres no pudieron pensarlo de tal manera. Generalmente, es mejor no tener lluvia para una cruzada. Pero era diferente en India.
Había una pesada lluvia mientras ellos estaban sufriendo en medio de una sequía severa. La lluvia era la gracia de Dios para la población local. También, cuando ellos me vieron predicando y orando por ellos tan fuerte inclusive en tan fuerte lluvia, más personas fueron tocadas en sus corazones.
Es por eso que el día siguiente, un inimaginable gran número de personas vino y la muchedumbre llenó la inmensa playa.
Por consiguiente, debido a la pesada lluvia, nosotros fuimos capaces de tener la más grande y grandiosa cruzada de todas.
Romanos 8:28 dice, “Y si sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es a los que conforme a su propósito son llamados.”
Fe no es simplemente querer y tener a Dios obrando de la manera que nosotros queremos que Él obre.
Si nosotros creemos verdaderamente, tenemos que comprender la voluntad de Dios confiando en Él todo el tiempo.
Y dentro de la voluntad de Dios tenemos que encontrar nuestro camino y actuar con fe. Si tenemos autosatisfacción en nuestra situación con razonabilidad y seguimos la bondad, el Espíritu Santo siempre alumbrará nuestro camino.
De esta manera, podemos discernir si ir ahora es la voluntad de Dios, o debemos deteneros por el momento y continuar otra vez.
Ésta es la sabiduría para experimentar la obra de Dios el cual camina incluso con nosotros en el valle de muerte.
En tercer lugar, si tenemos una profunda benignidad, no sólo obedeceremos la palabra de Dios, sino haremos más de lo que se supone que nosotros debemos hacer.
Por ejemplo, supongamos que los padres le piden a su hijo que haga algo cuando ellos están saliendo.
“¡Cuida a tu hermano menor y haz tu tarea, también!”
Este hijo simplemente podría jugar una vez que él termine su tarea pero al momento que los padres retornen a casa, él no solamente realizó su tarea, sino que le dio un baño a su hermano menor, lavó los platos, e hizo alguna limpieza del hogar también, a pesar de que no era realmente perfecta.
Él intentó entender el corazón de sus padres e hizo más de lo que se suponía que él tenía que hacer. ¡Cuando ellos ven a este tipo de niño, cuan encantador es él, y cuan orgullosos de él están sus padres!
A pesar de que es solamente un niño, él es digno de confianza.
De la misma manera, aquellos que tienen una voluntad benigna obedecerán la palabra de Dios como es debido por que ellos aman a Dios.
Además, por el alumbramiento del Espíritu Santo, ellos pueden discernir lo que es bueno en todo de manera que ellos puedan hacer la bondad que está en un nivel más alto.
Cuando Dios les ordena una cosa, entendiendo el corazón de Dios, ellos hacen dos o tres, o aún mas que eso.
Cuando Dios el Padre mira a este tipo de hijos, Él estará tan complacido diciendo, “Ellos están después de mi corazón.” Por ejemplo, en su vida cristiana, ustedes a veces tienen que escoger entre dos cosas.
Por supuesto, estoy hablando acerca de un caso en que ambos no están en contra la verdad.
Si uno es verdad y el otro es mentira, ustedes tienen que escoger la verdad obviamente.
Pero sólo si ustedes están en el tercer nivel de fe, no actuarán en la ilegalidad solamente porque es beneficioso para ustedes.
Si las dos cosas estuvisen bien en la verdad, la mayoría de las personas quisiesen escoger lo que ellos mismos quieren más.
Pero si nosotros tenemos completa benignidad, entonces, nosotros no escogeríamos lo que nosotros quisiésemos, sino la opción que pueda glorificar más a Dios.
Nosotros pensaríamos de qué manera agradará más a Dios. Era el caso con Daniel. Debido a los pecados del reino del sur de Judá, fue invadido por personas extranjeras.
Daniel y sus amigos fueron tomados como cautivos al país Gentil.
Aun cuando eran cautivos, ellos vivieron en el palacio del rey, vinieron a comer la comida escogida del rey.
Pero esta comida escogida posiblemente contenía el tipo de comida detestable prohibida por la ley de Dios.
Daniel y sus tres amigos le pidieron un favor especial al jefe de los oficiales. Ellos le pidieron que les dieran sólo agua y vegetales.
Pero el jefe de los oficiales estaba preocupado de que si las apariencias de esos jóvenes no fueran buenas, él sería castigado por el rey.
Así que Daniel y sus amigos le sugirieron que él hiciese una prueba en ellos solo por 10 días. Después de 10 días de comer solamente vegetales y beber agua, algo asombroso sucedió.
El rostro de Daniel y sus amigos parecía mejor y más robusto que el de los otros jóvenes, aun cuando ellos comieron solamente vegetales mientras que los otros jóvenes comían la comida escogida del rey.
En un caso como el de Daniel ¿Qué habrían hecho ustedes? Como un simple cautivo, ustedes tienen que comer lo que se les dé. Ustedes no están en posición de hacer ninguna elección o demanda.
Especialmente, ellos no les están dando a ustedes comida de baja calidad, sino la comida escogida del rey.
Puede contener alguna comida detestable, pero no todas las partes de ella eran detestables.
Si ustedes dicen que quieren una comida diferente, el oficial principal podría disgustarse con ustedes, e inclusive causar el enojo del rey también.
Ustedes pueden comer solamente lo que se les da al igual que los otros cautivos pensando, “Esta es una situación que está fuera de mi control.” Pero Daniel y sus amigos ofrecieron voluntariamente comer solamente vegetales, no comiendo la comida de buena calidad.
Dios estaba muy complacido con su corazón que intentaba escoger lo que era más apropiado a los ojos de Dios.
Así que, Dios trabajó en cierta manera para que sus apariencias fuesen mejores y más robustas que aquellos jóvenes quienes estaban comiendo de la comida escogida por el rey.
Además, Daniel 1:17 dice, “A estos cuatro muchachos Dios les dio conocimiento e inteligencia en todas las letras y ciencias\\\\\\\\\\\\\\\\\\\\\\\\\\\\\\\; y Daniel tuvo entendimiento en toda visión y sueños.”
Daniel y sus amigos recibieron las grandes bendiciones debido a su comprensión y sabiduría.
Aun cuando ellos eran solamente cautivos en ese país, ellos pudieron alcanzar altas posiciones siendo reconocidos por el rey.
Hermanos y hermanas, no es algo muy fácil el escoger lo que es más apropiado a los ojos de Dios en todas las materias.
Aun si escogemos lo que es más ‘bueno’, tendríamos algunas dificultades en lugar de inmediatas bendiciones.
Pero incluso en esos momentos, debemos tener la fuerza de voluntad para tomarlas, sin ninguna queja o resentimiento.
Podemos hacer esto sólo cuando tenemos la libertad espiritual viviendo en la verdad solamente.
Debemos tener una firme confianza en Dios, creyendo que Dios está de nuestro lado y Él es el dueño de nuestra vida.
Acerca de escoger lo que es más apropiado a los ojos de Dios con benignidad, vamos a continuar en la próxima sesión.
< Conclusion> Estimados hermanos y hermanas en Cristo, la benignidad es escoger lo que es más apropiado a los ojos de Dios. Pero aquí, debemos recordar una cosa. Debemos recordar qué tipo de actitud Daniel y sus amigos tuvieron hasta que ellos fueron capaces de pedirle al jefe de los oficiales tal favor.
Para el jefe de los oficiales, él no tenía que escuchar en lo absoluto su petición. Si él lo hacía, él podría ponerse en situaciones difíciles. Él podía ignorarlos simplemente, pero él les hizo un favor especial a ellos. Por supuesto ésta era la gracia de Dios.
Pero al mismo tiempo, tenemos que entender que Daniel y sus amigos eran muy buenos, fieles y encantadores delante del jefe de los oficiales y otras personas.
Significa que ellos habían acumulado suficiente medida de sus buenos hechos conforme a la justicia de manera que en el momento crucial Dios pudo mover el corazón del jefe de los oficiales.
Cuando ustedes muestran su fe, algunas veces tienen que ganar un poco de entendimiento de los otros. Por ejemplo, ustedes quieren participar en un evento de la iglesia, pero no puede tomar tiempo libre de su trabajo o ustedes tendrán un evento familiar al cual asistir.
En estas ocasiones, si ustedes pueden resolverlo de algún modo y pueden participar, sería bueno. Pero para hacer esto, ustedes tienen que acumular bondad como en los tiempos habituales.
Ustedes siempre tienen que trabajar fielmente y ser reconocidos por otros. Tienen que hacer un trabajo apropiado antes de que tomen su tiempo para un evento de la iglesia de manera que ustedes no causen ningún tipo de inconvenientes a sus empleadores.
Para los miembros de su familia, también, ustedes deben mover sus corazones permitiéndoles sentir que ustedes no pueden estar con ellos en cuerpo pero sus corazones siempre está con ellos.
Si ustedes solamente actúan como ustedes quieren normalmente, y actúan con fe solo cuando es necesario porque ustedes quieren pedirles que les excusen por algo, esto no es fe en lo absoluto. De hecho, esto viene de sus deseos egoístas.
Aquéllos que tienen gentileza y benignidad no tienen motivaciones egoístas. Solamente cuando no tenemos motivaciones egoístas podemos mirar la ancha fotografía con corazones más amables, no insistiendo en nuestras propias opiniones solamente.
De esta manera, podemos escoger lo que es ‘bueno’ a los ojos de Dios y ganar el corazón de otros, también.
Sólo cuando actuamos de manera consciente delante de Dios, Él puede trabajar para nosotros y puede recibir la gloria sin causar que Satanás nos traiga ninguna acusación.
Yo espero que ustedes entiendan esta regla de justicia y cultiven verdadera gentileza y benignidad.
Oro en el nombre del Señor que ustedes viviran una vida abundante y rica con la sabiduría dada por el Dios de lo alto. [Amén] |
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