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| Noticias Manmin No. 211 |
| HIT |
7362 |
| DATE |
2016-04-24 |
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Renovación y sanidad mediante las obras del Espíritu Santo
El Dios de amor se complace con Sus hijos que dependen y confían en Él. Él soluciona todo tipo de problemas en sus vidas y los dirige a vivir con felicidad, sin preocupaciones ni ansiedad. A continuación algunos testimonios de miembros de la iglesia que han sido sanados por el poder del Espíritu Santo, dentro y fuera de Corea.
«Fui sanado de asma después de tomar la mano del Dr. Jaerock Lee»
Diácono Byunghyup Jeon (47 años), Iglesia Manmin de Masan (Corea del Sur)
La familia del diácono Byunghyup Jeon (desde la izquierda: diácono Jeon, sus hijos Sehyun y Younghyun, y su esposa la diaconisa Hyojeong Yim)
Yo pensé que tenía un simple resfriado, pero los síntomas empeoraron con el tiempo y se me hacía difícil respirar. Cuando respiraba escuchaba sonidos extraños y me despertaba dos o tres veces cada noche. Una vez que me despertaba, se me hacía muy difícil volver a dormir. Cierta noche tenía dificultades para respirar y trataba de hacerlo incluso con las ventanas abiertas.
En octubre de 2014 los exámenes médicos demostraron que yo padecía de asma. La causa era desconocida. Por la gracia de Dios, comencé a asistir a los servicios de adoración y la Reunión de oración de Daniel. Al reflexionar sobre mi vida con la Palabra de Dios, me di cuenta que tenía muchas formas del maldad, y comencé a arrepentirme.
En febrero de 2015, tuve un sueño. En el sueño vi al Pastor Principal Dr. Jaerock Lee. Me incliné ante él y le hablé de mi enfermedad. Y luego él oró por mí con mucho fervor. Después del sueño, portando el nombre de mi enfermedad escrito en mi mano, fui donde el Pastor Principal y tomé su mano. Entonces los síntomas del asma desaparecieron de inmediato.
Los siguientes exámenes médicos confirmaron que yo ya no padecía de asma. ¡Aleluya!
«Mis huesos rotos sanaron rápidamente gracias a la oración que trasciende el tiempo y el espacio»
Diaconisa mayor Hyangwon Lee (56 años), Zona 15 (Corea del Sur)
El 7 de noviembre de 2015, mientras caminaba a prisa, resbalé y caí al piso, y no pude levantarme. Me levanté con ayuda de otras personas y sentí mucho dolor. Una ambulancia me llevó al hospital. La radiografía mostró que el cuello de fémur (huesos de la cadera) estaba fracturado.
El médico indicó que me sometiera a cirugía de inmediato para corregir los huesos. Además me indicó que debía quedarme en cama por más de un mes y descansar todo lo posible. Esa noche difícilmente logré dormir por causa del dolor. Tampoco podía darme la vuelta ni moverme. Necesité la ayuda de mi familia para ir al baño.
El domingo, es decir, al siguiente día, envié una petición de oración al Dr. Jaerock Lee que estaba en su casa de oración en la montaña. En cierto momento más tarde ese día comencé a sentir que el dolor se desvanecía poco a poco. Pude dormir bien esa noche. El lunes no sentí ningún dolor y pude ir al baño usando un bastón, sin ayuda de los demás.
Al día siguiente pude levantarme sola, sin ningún tipo de ayuda. Me recuperé rápidamente y pude moverme con normalidad. Más adelante acudí al hospital para que me hicieran otra radiografía, la cual mostró que el hueso fracturado de mi cadera se había unido bien.
Doy todas las gracias y gloria a Dios quien me permitió experimentar Su sorprendente amor y poder.
«Desapareció un bulto (fibroma) del tamaño de una nuez»
Diaconisa mayor Misuk Kim (44 años), Zona 1 (Corea del Sur)
Desde los primeros meses del 2015 comencé a sufrir fuertes dolores menstruales. Sentía como si le daban vueltas a mis intestinos. Yo sentía escalofríos y a veces me desmayaba. Tenía excesivo sangrado menstrual y algunas veces tenía sangrados fuera del tiempo del período menstrual. Mi rostro se inflamó y se me hacía difícil subir escaleras porque no tenía fuerzas. Por lo general me quedaba sin aliento, me dio anemia y constipación. También perdí mucho cabello.
El 4 de enero de 2016 me hicieron una ecografía del útero. El médico indicó que tenía tres fibromas. Dos estaban en el centro del útero y no causaban problemas puntuales, pero el otro, que era del tamaño de una nuez, estaba en el fondo y presionaba mi útero. Él añadió que esa era la causa de los sangrados y me advirtió que en el peor de los casos tendría que extirpar el útero. Él escribió una solicitud para que yo pudiera recibir un tratamiento en un hospital más grande.
Entonces comencé a analizar mi vida cristiana. Yo había trabajado como líder de la iglesia pero aún tenía cosas malas tales como la arrogancia en mi corazón. También me arrepentí por haber tenido una fe tibia. El 15 de enero recibí la oración con el pañuelo de la Pastora Heesun Lee, Pastora guía de la misión de mujeres (Hechos 19:11-12). Después de eso yo todavía tenía sangrado. Dos días después, junto con el sangrado salió de mi cuerpo un bulto negro. Desde ese momento dejé de sangrar y todo volvió a su normalidad durante los períodos menstruales.
Entonces me preparé para ser sanada por completo al asistir a la Reunión de Sanidad Divina en el Centro de Oración Manmin. El 7 de febrero de 2016, los miembros de la iglesia tenían la oportunidad de saludar al Pastor Principal Dr. Jaerock Lee, y escuchar su mensaje. Cuando yo recibí su oración por los enfermos y tomé su mano con fe, el gozo me inundó el corazón y obtuve la certeza de que sería sanada. Sentí que me sonrojaba, y que todo volvía a ser normal. Ya no sufría para respirar, y tampoco tuve constipación. ¡Aleluya!
El 18 de febrero fui al hospital para un nuevo chequeo. La ecografía demostró que el fibroma que había causado el sangrado, así como uno de los fibromas en el centro, habían desaparecido por completo y el otro se había hecho más pequeño (de 3 a 2,2 cm). Le doy toda mi gratitud y gloria a Dios.
Antes de la oración
Después de la oración
«Leí el libro Espíritu, Alma y Cuerpo y mi vida fue renovada»
Hermano Reward Sibanda El Hermano Reward Sibanda es un empleado de una de las empresas en asociación con GCN. Él recibió el libro Espíritu, Alma y Cuerpo del Dr. Lee durante la Convención NRB 2015. Él expresó estar impresionado con el libro y obtuvo un profundo entendimiento y luego compartió la gracia con cientos de cristianos. Este año él visitó el stand de GCN y expresó su gratitud sincera (Hermano Reward Sibanda junto a James Jaehwan Lee, Director del stand de exhibiciones de GCN).
Cuando leí el libro Espíritu, Alma y Cuerpo escrito por el Dr. Jaerock Lee, me impresionó mucho que el libro pudiera renovar la vida de las personas. Yo creo que hay muy pocas personas que comprenden la voluntad original de Dios y la explican a los demás.
El libro Espíritu, Alma y Cuerpo del Dr. Lee explica los conceptos fundamentales del espíritu, el alma y el cuerpo de modo que aun las personas de otras culturas puedan entenderlos bien. Yo puedo comprender con exactitud de qué está hecho el ser humano.
Espíritu, Alma y Cuerpo Volúmenes I y II, escritos por el Dr. Jaerock Lee
Después de leer este libro me sucedió algo sorprendente. Sentí que la Palabra en la Biblia conmovió mi corazón por primera vez. Comencé a orar en un nivel diferente y aprendí cómo debía orar. Pude sentir la Palabra de Dios penetrando hasta la división de mi alma y mi espíritu, hasta las coyunturas y los tuétanos. Pude ponerla en práctica en mi vida. Este libro renovó mi vida y cada persona que lo lee ha experimentado la renovación de sus vidas. Agradezco de todo corazón al Dr. Lee.
«Fui liberado de los dolores nocturnos que me hacían sentir que dejaría de respirar y moriría»
Hermano Chendsuren (35 años), Iglesia Manmin de Mongolia
En 1999 comencé a sentir dificultades para respirar. Fui al hospital para una revisión médica pero no se encontró ninguna anomalía. Sin embargo, a menudo me despertaba a media noche por la dificultad que tenía para respirar. Sentía como si alguien me tapaba la boca con la mano, y pensaba que iba a morir. En las noches mi corazón latía más rápido de lo normal varias veces y parecía que se iba a salir por mi boca.
Yo sentía temor de este dolor de muerte que me atormentaba cada noche. Fui una vez más al hospital para que me examinaran el corazón y los pulmones, y aun me sometí a un examen psiquiátrico, pero me dijeron que no tenía ningún problema. En cierta ocasión acudí a un maestro budista y al chamanismo, pero nada funcionó. Dado que yo había sufrido por varios años de estas dificultades para respirar, tenía problemas para subir y bajar las escaleras.
En octubre de 2015 un examen médico demostró que mi corazón no estaba funcionando con normalidad. Yo padecía de respiración paroxismal causada por la arritmia.
En aquel tiempo yo era miembro de la Iglesia Manmin de Mongolia, pero no había asistido por un largo tiempo. En noviembre de 2015 fui a la iglesia y asistí a los servicios dominicales de adoración. El hermano Botzorig, pastor de la iglesia, oró por mí con el pañuelo de poder (Hechos 19:11-12). Él dijo que el Pastor Principal de la Iglesia Central Manmin, el Dr. Jaerock Lee, había orado por el pañuelo.
Cuando yo recibí la oración, sentí algo que salía de mi cuerpo y mi corazón recibió paz. Me sentí bien y limpio. Desde entonces he estado sano, sin muestras de anormalidades. Duermo bien y me despierto con normalidad. Me siento agradecido y sorprendido de poder llevar una vida común. Incluso cuando corro al subir o bajar las escaleras, no tengo ningún problema. ¡Es asombroso! ¡Aleluya!
«Fui sanado de los efectos de la malaria crónica»
Hermano Heritie Colongzi Kabasele (32 años), Iglesia Manmin de Kinshasa, (República Democrática del Congo)
En el 2006 yo sufrí una grave fiebre muy alta; me diagnosticaron malaria crónica. No podía caminar por causa del dolor a mi costado. No podía recostarme, así que debía hacerlo de lado. Incluso tuve dolor de cabeza, así que no podía comer bien. Los síntomas se debían a un agrandamiento esplénico. Tomé medicamentos y recibí tratamiento médico en el hospital. Pero no hubo ninguna mejoría.
En febrero de 2006 se realizó la Cruzada Unida RD Congo en el Trimph Boulevard 1997 en la ciudad de Kinshasa. Mi padre deseaba que yo fuera sanado por medio de la oración del Dr. Lee, así que me llevó y me ayudó para que recibiera la oración por los enfermos. Entonces fui sanado de mi enfermedad.
En el 2010 comencé a tener fiebre alta otra vez, y me causó que desmayara de repente en junio y en julio. A menudo me llevaban al hospital en una ambulancia. En el 2011 no podía seguir yendo al trabajo.
En enero de 2015 uno de mis amigos me invitó a la Iglesia Manmin de Kinshasa y me registré en la iglesia. Dos meses después comencé a prepararme para el evento de la celebración de aniversario de la iglesia. Yo no me sentía confiado por causa de la condición de mi salud. Pero participé en la preparación de las presentaciones después de escuchar que si yo agradaba a Dios, Él respondería mi oración. Asistí a todos los servicios de adoración y con fervor recibí la oración del Dr. Lee por los enfermos transmitida en GCN.
Desde entonces no he tenido ningún problema en mi cuerpo y me he mantenido saludable. Solía padecer dolores de cabeza, sudoración del cuerpo y debía recostarme por falta de fuerzas durante gran parte de mi vida pasada. Pero ahora estoy saludable y puedo adorar a Dios tal como quiero. Me siento feliz. ¡Aleluya!
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