"Dios abrió y me dirigió hacia el camino a la bendición por haber confiado en Él quien nos da de acuerdo a lo que hemos sembrado"

Anciano Jung Huh (Iglesia Manmin de Gwangju, Director de la Sucursal de Seguros Shinhan de Gwangju)

Llegué a la Iglesia Manmin de Gwangju en 1997 al ver un anuncio de las Reuniones de Avivamiento. Una de las frases en aquel anuncio decía: "La Iglesia que ora los 365 días del año" y eso cautivó mi atención. La Iglesia Manmin de Gwangju asiste diariamente a través de internet a las Reuniones de Oración de Daniel que se realizan en la Iglesia Central Manmin, así que yo también oraba cada día y encontré el verdadero significado de la vida escuchando los mensajes de cada servicio.

De mi Carrito Viví y de Corazón Agradecí

Un día en 1998 mi salario me fue confiscado debido a deudas que se me habían asignado por una garantía que había proporcionado 2 años atrás. Finalmente se me obligó a salir de la compañía sin remuneración alguna. A pesar de que yo vendía rosquillas coreanas en un carrito de ventas ambulantes mi corazón se sentía bien. Yo continué asistiendo a las Reuniones de Oración de Daniel cada noche, ahí me arrepentía y le agradecía a Dios por haberme mostrado mi desobediencia a Su Palabra escrita en Proverbios 22:26 que dice:
«No seas de aquellos que se comprometen, Ni de los que salen por fiadores de deudas.»
Yo lamenté esta situación ante Dios a pesar de que era algo que hice antes de llegar a la Iglesia Manmin y de aprender de la Palabra de Dios. Ni siquiera podía pagar mi cuenta de electricidad y en medio invierno tenía que ducharme con agua fría para ahorrar el gas, pero nunca me quejé, sino que dejé que alabanzas salieran de mis labios. Nada podía robarme aquel gozo y no tenía ninguna preocupación porque Dios el Todopoderoso es mi Padre.

Entregué las Ofrendas a Dios y Serví a mis Vecinos

En Febrero del 2003 la iglesia se encontraba construyendo el nuevo edificio. Yo decidí ofrendar todo lo que estaba a mi alcance a pesar de que no teníamos mucho. Cierto día le dije a mi esposa: "Debemos plantar la semilla de fe si es que queremos recuperarnos de nuestra pobreza". Ella aceptó gustosa y yo me sentí agradecido por su actitud.
De pronto una noche el Pastor Principal Dr. Jaerock Lee se me apareció en sueños y me dijo: "Debes reducir tus gastos y amar a los demás". ¡Eso era tan cierto! ¿Cuál es el beneficio de amar a los demás y de practicar el ahorro? Pues mi familia llegó a ser unida en fe, intentamos darnos confianza y ser agradecidos el uno al otro a pesar de la situación difícil en la que nos encontrábamos, y aunque no teníamos mucho ayudábamos a los necesitados a nuestro alrededor esperando que ellos también pudieran recuperarse de su situación.

Guiado por el Camino de Bendición

Cuando dejé de vender en mi carrito ambulante empecé a trabajar como administrador del área de limpieza en un departamento, pero continué buscando un trabajo decente. Además hice una ofrenda de oración de 21 días y le dije a Dios: "Yo quiero glorificarte con las bendiciones que reciba de tu parte pero antes permíteme prepararme como una vasija limpia de modo que puedas derramar abundantes bendiciones sobre mí".
En el 2006 alguien me recomendó un trabajo como asesor de seguros lo cual fue difícil para mí porque no conocía nada acerca de ese negocio, así que al mes tuve que dejar ese trabajo. Sin embargo, cada vez que visitaba al Dr. Lee el me preguntaba si yo continuaba trabajando en ese lugar, y luego de varias veces me di cuenta de que había un camino de bendición para mí en eso, entonces empecé a orar por una segunda oportunidad ya que yo lamentaba haber dejado ese trabajo cada vez que escuchaba los testimonios de las bendiciones que recibían aquellos que se dedicaban a ese negocio.
Un día yo escuché que la compañía de seguros Shinhan planificaba instalar una sucursal, entonces me reuní con el presidente y le sugerí que estableciera esa sucursal en la ciudad de Gwangju. Él aceptó con gusto y el 15 de Marzo de 2007 se inauguró la sucursal con tres empleados, incluyéndome a mí.

Abundancia Tanto en lo Espiritual como en lo Material

El personal de la empresa era dedicado y se consideraban unos a otros. Cada uno compartía sus secretos personales sobre el negocio de seguros. Además llegaron a ser uno en espíritu durante los servicios que se llevan a cabo de forma alternada y mensual tanto en la oficina principal como en la sucursal de Gwangju. Eventualmente el número de empleados subió a 19 y he recibido muchas bendiciones en calidad de presidente de la sucursal.
Este año mi esposa y yo hemos recibido tareas en la iglesia encomendadas por Dios, por mi parte se me ha encargado la presidencia de la Misión de Hombres, y mi esposa ha sido nombrada presidenta de la Misión de Mujeres.
¡Le agradezco a Dios por haberme dado un corazón gozoso y agradecido aun en medio de las adversidades!