Hermano Taekon Oh (Misión de Jóvenes Adultos 2)




Junto a su buen hermano, Hyunkwan Monn, quien Dios le envió como un buen socio para la bendición de buenos resultados de ventas.

Nací en una familia muy pobre como un hijo no deseado, por lo que durante mi niñez atravesé muchos tipos de dificultades. Mientras crecí en un hogar disfuncional, busqué cosas destructivas y violentas, incluso antes de entrar en la escuela primaria. Tan pronto como entré en la escuela primaria, me hice famoso por mi hostigamiento en contra de los demás.

Entretanto, mi madre, mi hermana y yo fuimos guiados a la Iglesia Central Manmin. Pero debido a que no llevaba una buena vida en la fe, comencé a fumar en el cuarto grado de la escuela primaria y usualmente me escapaba de mi casa. Robaba dinero y estaba involucrado en conductas ilícitas. Cuando mis padres se divorciaron yo abandoné la escuela. A la edad de 19 años no tenía a nadie ni nada en qué confiar, por lo que estaba exhausto y me acerqué a la iglesia. Estaba tan feliz de todo en la iglesia y oraba, pero sólo tenía un pequeño fundamento del cristianismo y sentía dolor ya que recordaba las cosas de las cuales ya me había arrepentido. Cuando recordaba todos los pecados que había cometido, pensé que mi conciencia había sido cauterizada con un hierro candente y dudaba de si podría haber una oportunidad para que fuera salvo. Finalmente caí en profundo dolor en medio de las acusaciones de Satanás.

No me había dado cuenta del amor de Dios, quien promete en Su Palabra que cuando nos arrepentimos y nos apartamos del pecado que hemos cometido, Él nos perdona como describe la Biblia: "Cuanto está lejos el oriente del occidente, hizo alejar de nosotros nuestras rebeliones", y "nunca más me acordaré de sus pecados y transgresiones". Perdí fuerzas y caí en la angustia y el miedo. En ciertas ocasiones cuando me estaba duchando, era sobrecogido por el miedo; me desmayaba y caía. Traté de interrelacionarme con mis novias para calmar mi corazón desconsolado. Luego salí de la iglesia e ingresé al servicio militar y casi pierdo la vida un par de veces. Al culminar mi servicio militar, invertí en una tienda de accesorios pero fracasé completamente. Todo lo que me quedaba era una gran cantidad de deudas.

Después de eso renté un cuarto de una casa cerca de la iglesia y trabajé a medio tiempo en un Ciber café y comencé a buscar otro empleo. Desde octubre de 2009 en ciertas ocasiones pude asistir a la iglesia y escuchar los sermones del Pastor Principal Dr. Jaerock Lee acerca del infierno. Al principio no podía escuchar los mensajes debido al miedo, sino que al contrario me dormía en los servicios, pero mientras transcurría el tiempo comencé a pensar en muchas cosas.

"¿Qué sería de mí si viviera este tipo de mala vida?" Al principio no prestaba atención a los servicios dominicales matutinos, pero luego comencé a asistir a los servicios dominicales vespertinos y a las reuniones de confraternidad. El 2 de noviembre de 2009, sentí un deseo de ir a la iglesia. El momento que me senté en el asiento del santuario para atender a la Reunión de Oración de Daniel, muchas lágrimas brotaron de mí y me sentí motivado a esconderme en una gran vergüenza. El tiempo de irme a mi trabajo parcial se acercaba, pero me quedé allí.

Las siguientes dos noches asistí a las Reuniones de Oración de Daniel, simplemente le dije a Dios en oración: "¡Lo siento! Me acerco delante de Ti, perdóname". Lloré mucho y luego me fui a mi casa. Algunos días después clamé profundamente a Dios diciendo: "Ayúdame Dios, me he equivocado. Soy más malo que Judas Iscariote; perdóname, no quiero ir al infierno; ¡sálvame Dios!, por favor dame otra oportunidad, ¡nunca más te defraudaré!" Dios me dio la gracia y me ayudó a arrepentirme de mis pecados con lágrimas de un corazón sincero. Inmediatamente deseché las cosas mundanas como beber, fumar y las mujeres y todas las cosas que me gustaba hacer por tanto tiempo.

Miré de nuevo a mis días pasados con un corazón firme y completamente arrepentido de mis malas acciones, y luego envié una carta de arrepentimiento al Pastor Principal para pedirle que intercediera por mí. Luego recibí su oración con un corazón sincero y una ofrenda. La gracia y misericordia de Dios vino sobre mí. Reinstalé en mi computadora un firewall para prevenir cualquier tipo de material pornográfico disponible en la Internet. Luego el deseo de ver ese tipo de materiales obscenos desapareció por completo, desde ese entonces no he vuelto a ver tales cosas.

Luego de que el problema de mi pecado se resolvió, mi corazón estaba gozoso y feliz. Realmente quise repagar por mis pecados cometidos. Por lo tanto, busqué e hice todo lo bueno que estaba a mi alcance y presté mis servicios para la iglesia en todo lo que podía. Hice todo esto con el único deseo de restaurar la bondad de Dios en mi vida. El pasado mes de diciembre, fui elegido para ser el secretario de mi grupo de diez personas en la Misión de Jóvenes Adultos 2.

La Misión de Jóvenes Adultos ofreció su servicio devocional 2010 el pasado mes de mayo. Debido a que para mi fue la primera vez que pude comprender el significado del servicio devocional y el dedicar mi vida para el Señor, impartió para mí un significado especial. En tres ocasiones ofrecí a Dios un ayuno de tres días para examinar totalmente mi pasado y alentarme a mí mismo en mi fe. Me preparé con todo mi corazón y mis fuerzas para dar una ofrenda especial en el Servicio Devocional, y participar en el equipo de danza. Yo estaba trabajando en un banco como guardia de seguridad, mi salario mensual era de 1.200.000 Won (Aproximadamente 1.000 USD). La deuda de mi tarjeta de crédito era tan grande debido a que había vivido una vida desenfrenada, pero yo estaba dando el 20% de mis ingresos, arrepintiéndome por no haber pagado todo el diezmo.

En el mes de junio ingresé a la compañía de seguros Joong-Ang de Seúl y comencé a trabajar como planificador de seguros. Dos meses después, algo sorprendente me ocurrió, el Pastor Principal Dr. Jaerock Lee; en la mitad de su estudio sobre el libro de Génesis, dio un estudio de cuatro sesiones acerca de "La semilla de vida", y le dijo a la congregación que escuchara las grabaciones de las cuatro sesiones más de diez veces. Cuando yo obedecí y repetidamente escuché diez veces los sermones, gané el tercer puesto de las ventas de nuestra empresa en ese mes. Pude hacer muchos contratos al presentar varios productos de seguros con costos de 300.000, 500.000 y 1 millón de won.

Leía al menos un capítulo de la Biblia y memorizaba un verso cada día y escuchaba y repasaba los tres sermones semanales. El pasado mes de agosto fui uno de los dos co-ganadores del primer puesto. Debido a que gané el primer puesto ya que muchas personas salieron de vacaciones, yo confesé que pude hacerlo sólo por la gracia de Dios y el amor incondicional del pastor por el hijo pródigo. Le dí toda la gloria y agradecimiento al Señor Jesús y a Dios por tomarme en sus brazos y guiarme, pues antes no tenía alegría y luz de esperanza en el camino de la vida.